Irán, más allá de la política

Irán suele dominar los titulares por sus permanentes choques con occidente, especialmente desde la Revolución Islámica de 1979.

Se trata de una nación compleja, de gran tamaño, con una población de más de 75 millones de personas repartidas entre diversos grupos étnicos.

Irán es un país que recibe pocas visitas de turistas debido a sus constantes tensiones con Estados Unidos y Europa. Es además una nación con una situación bastante delicada en lo que respecta a derechos humanos, definida por el relator especial de la ONU Ahmed Shaheed como atroz. Irán es uno de los países con más ejecuciones per-capita en el mundo, siendo la homosexualidad y el adulterio crímenes que pueden costar la vida.

El sistema político iraní es una teocracia donde, si bien existen poderes legislativo y ejecutivo, la máxima autoridad reside en los ayatolas o clérigos islámicos. Por ello sus leyes se basan en la Sharia. Esto hace que sea un país poco amigable para el género femenino, cuyo trato es muy diferente al que existe en occidente.

No obstante, más allá de todos los infortunios que le ha traído el fundamentalismo islámico, Irán es un país hermoso, cuyo potencial turístico es incalculable.

Las siguientes son algunas de las atracciones más interesantes que ofrece esta nación del medio oriente.

Bazar de Isfahán.